A lo largo del reciente Torneo de Clausura, y sobre todo en el tramo final, la U destacó por la fortaleza física de sus jugadores. El equipo llegó en óptimas condiciones a la definición, lo que a la postre le ayudó a obtener el título.
Esperando repetir la fórmula, es que ya está en marcha la preparación de la pretemporada de cara al Torneo de Transición, que parte en julio. Sebastián Fabres, preparador físico del Primer Equipo, ultima los detalles de una exigente preparación.
Los trabajos se iniciarán el 21 de junio en el CDA, día en que los campeones deben retornar de sus vacaciones. Al día siguiente, en una clínica de la capital, se harán las pruebas físicas para determinar el estado de cada integrante del plantel.
La última semana de junio el equipo podría dejar el CDA para trasladarse fuera de Santiago y concluir así la preparación física con trabajos más específicos. La fórmula, similar a la utilizada a principios de año, ya dio resultados en el primer semestre.
Así, con planificación y sin dejar nada al azar, el equipo buscará volver a ponerse a punto rápidamente para luchar por los objetivos de la segunda mitad del año, que incluyen Copa Chile y el Torneo de Transición.